CUERNAVACA
La ruta hasta esta población donde residió Hernán Cortés tras vivir en la Ciudad de México es divertida y digna de recorrer por sus sinuosas carreteras que transcurren entre las montañas, pero la ciudad no estará entre mis favoritas de México; quizás porque el Palacio de Cortés estaba en obras o por el aspecto descuidado de su Zócalo o el abundante tráfico reinante en todo el caco urbano … El caso es que a pesar de su Catedral, el Jardín Juárez o el Chapitel del Calvario, lo que iban a ser un par de días conociendo la ciudad, se convirtió en una sola tarde, y tras un refrigerio en una terraza observando la plaza principal, regresamos a la noche a Puebla.