Taos, NUEVO MEXICO – 12 y 13 de dic 2016

Mañana perfecta para circular por las montañas que rodean Albuquerque en compañía de Tony que me espera en su trabajo, pero una vez más lo planeado no sale como uno quiere. Con todo el equipaje preparado, la moto decide no despertar esta mañana y al enchufarle el arrancador que me regaló mi amigo Oscar Antolí de HISPANIA Energy Battery, consigo que el motor funcione pero el sistema eléctrico hace cosas raras …

Tras pasar por la casa de Keith (un mecánico amigo de Tony) parece que todo está bien pero ya se ha hecho tarde para el paseo por lo que me paso por su oficina para despedirme de él, cosa que me cuesta mucho trabajo hacer … Eres un gran tipo!

Viaje tranquilo por el interior de Nuevo México siguiendo la ruta recomendada por mi nuevo amigo. Todos los pueblos, ríos, puentes, misiones … tienen nombres españoles que hacen que parezca que estoy cerca de casa.

En San Diego charlo un rato con un señor que me pregunta por la moto, Charles Padilla, cuyo abuelo era de Cádiz, pero sus antepasados llevan mucho más tiempo viviendo en la zona. Me comenta que desde España tenemos olvidados a estos primeros colonos que viajaron hasta aquí y me da una tarjeta para que lo llame por si necesito algo en mi viaje.

Sigo camino hacia Taos donde me esperan unos nuevos amigos, Sam y Kate, que me acogen en su preciosa casa y, junto a su amigo Shawn, tenemos una amena y divertida cena, charlando de rutas off road y de los diferentes viajes (pasados y futuros) que cada uno tenemos en mente, y es que en su garaje tienen un buen repertorio: BMW F800GS, KTM450 y Suzuki DR650

Sam y Kate hablan bastante bien el castellano, así que la comunicación con ellos es más fluida, hablando un perfecto spanglish entre todos, je!

Esa noche preparamos la ruta del día siguiente para visitar la zona, pero al despertar, de nuevo la africota no quiere arrancar y cuando lo hace, vuelven los problemas eléctricos.

Tras varios checkeos, el diagnóstico es que el regulador ha dado sus últimas bocanadas. Por suerte llevo uno de repuesto, pero hay un cable negro que no sé dónde enchufarlo … Todo el día probando aquí y allá, numerosas llamadas a España (gracias Pepe, de Radikal Motos y gracias Martin), inestimable la ayuda de mi anfitrión Sam y de Shawn, pero nada, el nuevo regulador carga a 18 voltios, lo que freirá todo el sistema eléctrico de la moto.

Noche larga leyendo numerosos foros para intentar encontrar la solución, cosa que encuentro en el Foro de Africa Twin de España en un post de Sebito (en el que explica que ese cable no es de ‘tierra’ sino que debe ir a positivo.

Parece que esa es la solución para que el regulador cumpla su función correctamente pero son las 2 de la mañana y no es cuestión de andar cacharreando en el garaje a estas horas, así que a las 6.30 del día siguiente ya estaba levantado para hacer las comprobaciones y … voilá! La batería carga a unos 13,64 magníficos voltios.

Guardo todo el cableado, monto todo el equipaje, despedida de Sam y Kate (que me regalan un bote de Whisky casero elaborado por ellos mismos y ruta (con alguna dificultad en la carretera por la nieve) hasta Farmington desde donde estoy escribiendo estas líneas saboreando el tranquilamente el whisky de mis amigos.